Los lubricantes a base de silicona generalmente se consideran seguros para la mayoría de los sellos de caucho. Estos lubricantes son químicamente inertes, lo que significa que no reaccionan con el material de caucho. Ofrecen una excelente estabilidad térmica y mantienen su lubricidad en un amplio rango de temperaturas. Los lubricantes de silicona también brindan buena resistencia al agua y no se eliminan fácilmente.
Por ejemplo, el polidimetilsiloxano (PDMS) es un lubricante de silicona de uso común que es compatible con diversos materiales de caucho, incluidos los sellos de nitrilo, silicona y fluoroelastómero. Se emplea ampliamente en aplicaciones automotrices, aeroespaciales e industriales donde el sellado confiable es fundamental.
Los lubricantes sintéticos de polialfaolefina (PAO) son otra opción para los sellos de caucho. Las PAO son químicamente estables y ofrecen una buena compatibilidad con la mayoría de los elastómeros. Tienen un alto índice de viscosidad, lo que garantiza una lubricación constante en un amplio rango de temperaturas. Las PAO también presentan una excelente resistencia a la oxidación, lo que evita la formación de lodos y depósitos que pueden interferir con el rendimiento del sello.
Al lubricar los sellos de goma, es fundamental aplicar el lubricante con moderación. Una lubricación excesiva puede atraer suciedad y residuos, lo que genera contaminación y posibles fallas en el sello. Una capa fina y uniforme de lubricante es suficiente para reducir la fricción y garantizar un sellado adecuado.